Aquello en que uno fija la atención es lo que obtiene. Lamentarnos de lo que NO queremos, no nos trae lo que deseamos. Combatir lo negativo es una total pérdida de tiempo, si lo que realmente queremos es llevar a cabo cambios en nuestra vida. Cuanto más insistimos en lo que NO queremos, tanto más estamos creándolo. Lo más probable es que las cosas que siempre nos han disgustado, sigan formando parte de nuestra vida. Aquello en lo que se fija la atención es lo que crece. Tenemos que apartarnos de lo negativo para fijar la atención en aquello que realmente QUEREMOS ser o tener. Debemos aprender a usar afirmaciones positivas tanto al hablar como al pensar. Cualquier enunciado que formulemos es una afirmación, pero con demasiada frecuencia para pensar nos valemos de "afirmaciones negativas", que sólo sirven para continuar creando aquello que decimos que NO queremos. Hay que formular continuamente enunciados positivos sobre cómo queremos que sea nuestra vida, pero debemos hacerlo en "tiempo presente", diciendo siempre "soy" o "tengo". Nuestra parte subconsciente es tan obediente, que si formulamos nuestras declaraciones en tiempo futuro, diciendo "quiero" o "tendré"... pues ahí será donde siga estando siempre lo que deseamos... en el futuro !!! No importa cuál sea el problema, el punto principal sobre el que hay que trabajar es "amarse a sí mismo". Esa es la "varita mágica" que disuelve los problemas. Amarse a sí mismo, aprobarse y aceptarse, implica no auto criticarse jamás por nada. La auto aprobación y la aceptación de uno mismo son las claves de los cambios positivos. Todo lo bueno empieza por la aceptación de lo que hay dentro de uno mismo, y por el amor a ese ser que es uno mismo. Busquemos con empeño las pequeñas cosas que vemos en nosotros mismos y que nos parecen "buenas cualidades". A menos que se lo concedamos, las ideas no tienen ningún poder sobre nosotros; no son más que palabras, que no tienen absolutamente ningún significado. El significado se lo damos nosotros. Nosotros decidimos cuál es el significado que vamos a darles. Decidamos, entonces, pensar cosas que nos ayuden y nos apoyen. Parte de la aceptación de sí mismo reside en liberarse de las opiniones ajenas. Pensemos cosas que nos hagan felices. Hagamos cosas que nos gusten. Estemos con gente que sea de nuestro agrado. Comamos cosas que hagan que nuestros cuerpos se sientan bien. Para enfocar la construcción de algo nuevo en nuestro interior nos interesa partir de un punto de vista holístico, procurando nutrir y alimentar la totalidad del ser : cuerpo, mente y espíritu. Si nos desentendemos de cualquiera de estos aspectos, somos seres incompletos. No importa por dónde comencemos, siempre y cuando terminemos por incluir también las otras áreas.
(Extracto del capítulo 8 del libro de Louise Hay, "Usted puede sanar su vida")
